Mateo Cárdenas, escalador que a los 11 años inició su carrera deportiva para convertirse en una de las figuras de la escalada en nuestro país, tanto a nivel competitivo como en roca, consiguió la semana pasada uno de los logros más importantes de los últimos años para la escalada nacional al ser el primer colombiano en encadenar un 5.14a en nuestro país, más exactamente en los farallones de Machetá, lo cual abre el camino de la alta dificultad en nuestro territorio.

Este logro se fue gestando desde enero del presente año cuando Mateo, en conjunto con otros escaladores como Alejandro Rivero y Rafael Ávila, comenzaron una de las jornadas de apertura de vías más prolífica en este farallón, que lo han consolidado como uno de los mejores parques de escalada deportiva de alta dificultad en Colombia. Es así que en lo que va corrido del año han equipado más de una veintena de rutas de dificultades entre 5.12a hasta 5.13c, además de algunos proyectos que aún no tienen ascenso. Rutas como el Tinajo Pichón (5.13c), el Tinajo Mutante (5.13b), Macho Alfa (5.12d), El milagro (5.12b) y La Terapia (5.12b) son una pequeña muestra de estas nuevas vías de excelente calidad, la mayoría de las cuales tienen su primer ascenso a manos de Mateo.

De esta manera el proceso culminó el pasado miércoles cuando, después haber caído en la última sección varias veces, Mateo logró hilar uno tras otro todos los movimientos de este gigante al que denominó “La apuesta de la dama y el vagabundo en el infiernito”, y que humildemente cotó en 5.14a, pues podría llegar a ser más. De esta manera se convierte en el primer colombiano en alcanzar este grado en nuestro país y abre el camino para que los altos grados de dificultad estén más al alcance de escaladores locales, y para que cada vez más líneas de esta dificultad sean abiertas en Colombia. La buena noticia es que no parece que tenga ganas de parar de abrir rutas, por lo que seguramente tendremos noticias de nuevas vías y encadenes muy pronto.

Felicitaciones Mateo!!